¿Cómo podemos ser fortalecidos en nuestra fe?


Nuestra vida cristiana es una vida de fe, y la Biblia nos dice que como creyentes andamos por fe, no por vista. Pero en nuestra experiencia, especialmente cuando nos enfrentamos con circunstancias difíciles, a menudo nos desanimamos y nos resulta difícil poner nuestra confianza en Dios. Intentamos creer, pero en ocasiones sentimos que simplemente no tenemos suficiente fe.

Hebreos 11:1 nos dice que la fe da sustantividad a lo que esperamos y nos convence de las cosas que no podemos ver. Por supuesto todos queremos experimentar esto en nuestro caminar cristiano diario, pero ¿cómo podemos tener esta fe? ¿Cómo podemos ser fortalecidos en nuestra fe, sobre todo ante las dificultades?

Para responder a estas preguntas, echemos un vistazo a unos versículos claves sobre la fe.


¿Qué es la transformación según la Biblia?

¿Sabía usted que la Biblia habla acerca de algo llamado transformación? Esta palabra se encuentra en estos dos versículos del Nuevo Testamento:

2 Corintios 3:18: Mas, nosotros todos, a cara descubierta mirando y reflejando como un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Señor Espíritu.

Romanos 12:2: No os amoldéis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestra mente, para que comprobéis cuál sea la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable y lo perfecto.

Entonces, ¿qué significa ser transformados para nosotros los creyentes? ¿Cómo podemos experimentar la transformación en nuestra vida cristiana?


¿Cuál es el mejor momento del día para pasar tiempo con el Señor Jesús?

Cada mañana cuando nos levantamos, tenemos la opción de elegir cómo comenzar nuestro día. Veamos dos posibles situaciones:

Situación hipotética 1: suena el despertador, se levanta de la cama, comienza a arreglarse y ya está ansioso por el día que le espera. Mientras desayuna de prisa, se pone al día con las noticias, los mensajes de texto y los correos electrónicos. Finalmente sale apresuradamente por la puerta, absorto en su lista de quehaceres.

Situación hipotética 2: usted oye el despertador e inmediatamente dice: “Señor Jesús, te amo”. Se levanta de la cama y pasa un tiempo hablando con el Señor en oración y leyendo Su Palabra. Refrescado y nutrido por Su Palabra, usted se siente fortalecido y suministrado para enfrentar los desafíos del día.

Probablemente todos preferiríamos la segunda situación. Nuestra vida espiritual se beneficiaría grandemente y quizás hasta cambiaría drásticamente si comenzáramos cada día pasando tiempo con el Señor Jesús. Pero establecer un hábito requiere algo más que una inspiración fugaz; sería de gran ayuda ver por qué vale la pena. En esta entrada, veremos tres razones por las cuales es crucial pasar tiempo con el Señor, y cúal es el mejor momento del día para hacerlo.


Siete consejos para desarrollar el hábito de leer la Biblia diariamente

En una entrada anterior, vimos que el primer paso para entender la Biblia es leerla por nosotros mismos, de principio a fin. Así es como comenzamos a adquirir los componentes básicos de las Escrituras que son la base para nuestra comprensión de la Palabra de Dios. Pero ¿cómo empezamos? ¿Qué podemos hacer para desarrollar este hábito saludable y necesario de leer la Biblia regularmente?

En esta entrada, vamos a ver siete consejos prácticos que lo ayudarán a desarrollar un hábito diario de leer la Biblia.


El primer paso para entender la Biblia

La Biblia es un libro increíble lleno de sabiduría, poesía, historia y enseñanzas. Contiene profecías, figuras y símbolos misteriosos, junto con genealogías largas y leyes detalladas. Pero sobre todo, la Biblia revela quién es Cristo y el propósito eterno de Dios para la humanidad.

Como cristianos, puede que sepamos que deberíamos leer la Biblia, pero nos sintamos ansiosos al respecto. Tal vez nuestros intentos previos de entenderla nos hayan desanimado, o quizás pensemos que leer y digerir un libro tan complejo e importante es una tarea abrumadora. Pero la Biblia es la Palabra de Dios escrita para nosotros. Ciertamente Él desea que leamos y entendamos este regalo que nos ha dado. Hoy echaremos un vistazo al primer paso importante para entender la Biblia.


¿Cuál es la voluntad de Dios?

Probablemente le hayamos preguntado a Dios en algún momento: “¿Cuál es Tu voluntad para mi vida?”. Tal vez hayamos deseado saber la voluntad de Dios respecto a qué deberíamos estudiar en la universidad, qué tipo de trabajo deberíamos tener o con quién nos deberíamos casar.

Es propio de la naturaleza humana estar intensamente centrados en nuestros propios asuntos y no en los asuntos de Dios. Después de todo, ya que Dios es todopoderoso y divino, ¿qué podría querer o necesitar?